A propósito de la celebración, el Nano (Carlos Alfredo Camacho Lebrón) hizo una investigación científica y descubrió, después de escudriñar en los libros de  la verdadera historia de los EEUU y de entrevistar a algunos indígenas nativos de las antiguas colonias americanas, que en realidad la celebración no es de THANKSGIVING, como hasta ahora se creía.

 

La confusión nació porque la realidad es que con los primeros pobladores americanos de los EEUU (ingleses que huían de la persecución religiosa de los monarcas) venía un hombre llamado Guivin. Este personaje era muy religioso y siempre velaba por el bienestar de los demás, por eso fue que se aventuró a cazar unos pájaros grandes y negros que gritaban muy feo. El resultado nefasto fue que eran muchos los pavos (así se les bautizó después, ya que su nombre original era Huaxolotl en México) y lo corretearon hasta el agotamiento. Al caer cansado, fue atacado a picotazos y arañazos, encontrando una horrible muerte.

 

La iglesia, inmediatamente, en reconocimiento a su entrega generosa e incondicional ( y por la chinga que le pararon los pinchis pavos), decidieron postularlo para canonizarlo como el primer mártir americano, con el nombre de San Guivin.

 

El Nano, además, descubrió en su minucioso estudio, que la iglesia, además de canonizarlo, instituyó que en este cuarto jueves de noviembre, se celebre su gesto de entrega, matando a todos los guajolotes que podamos y que nos los comamos acompañado de un buen vino y mucho pastel de calabaza.

 

Fue así como nació la verdadera tradición de San Guivin entre los pioneros americanos.

 

Ah! Se me olvidaba un dato muy importante. Este hecho sirvió para que los indígenas de la región se hicieran amigos de los pioneros porque los pavos (turkey por sus siglas en inglés) ya los tenían hasta el copete. Se comían su maíz, y sus hortalizas y, como eran unos pajarotes endemoniados, no los podían matar con sus flechitas miadas.

 

Los nativos y los recién llegados formaron la primer comunidad americana en lo que después llegó a ser el gran imperio americano de los Yunaited Esteists (gringolandia en español), aunque, después, los gringos se arrepintieron e hicieron que los pobres indígenas tuvieran la misma suerte que los pavos; o sea que les dieron en la madre (in the mother, en inglés).

 

Y para reafirmar esta concienzuda investigación, el Nano encontró una imagen, en una antigua iglesia de la Nueva York, la cual les muestro para que no haya lugar a dudas. (adjunta).